La 17ª edición del IMS Ibiza se celebrará del 22 al 24 de abril de 2026. Entre paneles de expertos, momentos dedicados al bienestar, exploraciones tecnológicas y oportunidades de networking con las grandes figuras del sector, el evento se consolida como un punto de encuentro imprescindible para artistas, productores, managers y apasionados de la música.
La preventa está a punto de abrirse, y quienes no quieran perder la oportunidad de asegurarse su acreditación al mejor precio harían bien en estar atentos al sitio oficial, www.internationalmusicsummit.com, porque las plazas siempre se agotan rápido. Si hay un lugar donde la música electrónica respira y evoluciona, ese lugar es sin duda Ibiza, y el IMS lo sabe bien. Desde hace años, el evento no se limita a reunir a los nombres más influyentes de la industria, sino que examina sus dinámicas con una mirada crítica, anticipando cambios y revelando contradicciones.
Entre las sedes del Mondrian y del Hyde Ibiza en Cala Llonga, se genera un torbellino cultural para la escena internacional de la música electrónica. Una cita que va mucho más allá de un simple congreso, convirtiéndose en un laboratorio de ideas, conexiones y experimentación donde el futuro del género se escribe al ritmo de la música dance. Serán tres días intensos, diseñados para quienes quieran sumergirse en las tendencias emergentes, los debates más apasionados y las actuaciones que dejan huella, todo con el inconfundible telón de fondo de la isla blanca.
No es casualidad que, entre una conferencia magistral y un set al atardecer, hayan surgido discusiones capaces de sacudir los escenarios: desde los derechos de los artistas hasta los retos de la sostenibilidad, el impacto de la inteligencia artificial y la necesidad de diversificar los carteles. Mientras el mundo de la música digital atraviesa una fase de transformación sin precedentes, la edición 2026 promete elevar aún más el nivel, combinando análisis e entretenimiento en una fórmula cada vez más híbrida.
Está también el aspecto performativo, que convierte al IMS en un escenario único. Las actuaciones en vivo, muchas veces exclusivas, han regalado a lo largo de los años momentos que ya forman parte de la historia, y todo apunta a que esta vez no será la excepción. Sin olvidar al “elefante en la habitación”: la propia Ibiza, con su magnetismo y sus contradicciones, que siempre acaba convirtiéndose en protagonista.
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